(...) Madrid 27 de Abril de 1940.
Cuando estas recibas ya habré dejado de existir y mi último pensamiento habrá sido para mis dos niñas inocentes y desamparadas.
Ten valor Juli, piensa en nuestra nenita.
Las cartas y los retratos los he dejado en las Comendadoras así como la ropa todo se lo pides a Mateo, al que dirás que envío un abrazo para todos los amigos a los que deseo mucha suerte.
Un beso hasta dejar la vida a ti y la niña.
1 comentario:
Me ha recorrido un escalofrio al leer la carta, como revivir esos ultimos momentos y como afrontarlos, es tremendo con que entereza y fuerza dedicaban sus ultimos momentos a su familia. Desde luego para la familia, debe ser un tesoro esta preciada carta y muy triste a la vez. No tengo palabras para describir lo que siento.
¡Salud, Memoria y Libertad!
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